Los chalecos de seguridad de alta visibilidad proporcionan la máxima visibilidad a quienes trabajan en entornos de alto riesgo, como zonas con poca iluminación o de mucho tráfico. Son una pieza importante del Equipo de Protección Personal (PPE, por sus siglas en Inglés) y facilitan la visibilidad de los trabajadores. También ayudan a reducir el riesgo de accidentes y a garantizar la seguridad de los trabajadores. Conozca más sobre los distintos tipos de chalecos, cómo y cuándo utilizarlos y qué debe incluir la capacitación de sus trabajadores.
Tipos de chalecos de seguridad
Existen tres tipos o clases principales de chalecos de seguridad. Comprender las diferencias es esencial para seleccionar el chaleco apropiado para el trabajo adecuado.

Clase 1. Adecuado para entornos de bajo riesgo con un flujo de tráfico mínimo y bajas velocidades de los vehículos. Los chalecos de Clase 1 se caracterizan por un material de fondo mínimo y una cobertura corporal limitada. Son ideales para encargados de estacionamiento, conductores de reparto y quienes trabajan en entornos todoterreno.
Clase 2. Recomendado para entornos de riesgo moderado con mayor exposición al tráfico. Estos chalecos ofrecen material retrorreflectante mejorado y mayor cobertura, incluyendo mangas y bandas reflectantes adicionales. Ideal para trabajadores de la construcción de carreteras, servicios públicos y equipos de inspección.
Clase 3. Proporciona el máximo nivel de visibilidad para entornos de mucho riesgo con tráfico a alta velocidad o condiciones de poca iluminación. Estos chalecos también incorporan el máximo material retrorreflectante. Asimismo, cubren por completo el torso, los brazos y las piernas, y a veces incluyen capuchas. Son esenciales para los trabajadores de la construcción de carreteras, el personal de emergencias y los operadores de grúas.
Algunos chalecos también vienen con un diseño "rompible", que permite desgarrarse y prevenir así que el trabajador quede atrapado en la maquinaria o en un vehículo en movimiento.
Cómo y cuándo utilizarlos
Determinar cuándo utilizar chalecos de seguridad de alta visibilidad depende del entorno de trabajo específico y de los riesgos potenciales. A continuación se indican algunas aplicaciones clave:
Sitios con obras en construcción. Los chalecos son esenciales para los trabajadores de la construcción. Aumentan la visibilidad y reducen el riesgo de accidentes con maquinaria y vehículos.
Trabajos en carreteras. Las personas que trabajan en el mantenimiento de carreteras, el control del tráfico y la reparación de servicios públicos deben llevar los chalecos para garantizar que sean vistos por los automovilistas.
Servicios de emergencia. Los bomberos, los policías y los paramédicos requieren chalecos de alta visibilidad para permanecer visibles cuando responden a emergencias.
Almacenes e instalaciones industriales. Las personas que trabajan en almacenes, plantas de fabricación e instalaciones industriales se benefician de los chalecos de alta visibilidad para mejorar la seguridad, especialmente cuando trabajan cerca de maquinaria o vehículos en movimiento.
Capacitación de sus trabajadores
Una capacitación adecuada sobre el uso de chalecos de seguridad de alta visibilidad garantiza una visibilidad y eficacia óptimas. Los temas de capacitación más importantes son:
Asegurarse de que le queden bien. Los chalecos deben elegirse en las tallas adecuadas y ajustarse correctamente para garantizar un ajuste ceñido y, al mismo tiempo, cómodo, sin restringir el movimiento.
Utilizarlos correctamente. Las bandas reflectantes deben colocarse en la parte delantera y trasera para lograr la máxima visibilidad. Asegúrese de que el chaleco no quede cubierto por otras prendas o equipos.
Mantenerlos e inspeccionarlos frecuentemente. Busque marcas de desgaste, como bandas reflectantes descoloridas o tejido dañado. Reemplácelos cuando sea necesario. Los chalecos de seguridad son una inversión en la seguridad de los trabajadores y su eficacia disminuye con el tiempo.